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¿La pandemia ha cambiado su forma de pensar sobre el dinero o sus objetivos y valores financieros? ¿Si es así, como?

En general, ha sido necesaria una mejor administración del dinero. En mi caso, trabajo de forma independiente y no siempre hay trabajo a disposición, tengo que buscarlo y gestionarlo. Entonces, el dinero que gano debo administrarlo de tal forma que cubra mis necesidades durante el tiempo en que no hay trabajo o se realiza la búsqueda de trabajo o se hace la primera fase del trabajo y aún no hay pagos. Una ventaja es que, con el confinamiento, se gasta menos porque se sale menos. Hay menores oportunidades de comprar, por ejemplo. Aunque hay comercio electrónico, es más fácil resistirse a la tentación de consumo. Una desventaja podría ser que compras básicas como los alimentos son más caras porque las llevan hasta la puerta del hogar. Eso incrementa costos para uno. También es cierto que uno quisiera ahorrar, pero es difícil por el mismo esfuerzo de cubrir todo lo básico cuando no hay un empleo a disposición.